El uso creciente de la firma cualificada
El mercado de la Firma Digital, según el estudio de mercado realizado por Markets & Markets, lleva experimentando un crecimiento anual del 35,7 % desde 2022 y prevé un crecimiento estable hasta 2027. Este rápido crecimiento se debe a múltiples factores, como la urgencia por parte de las empresas en la adopción de procesos paperless para disminuir su huella de carbono en favor del cambio climático, o la necesidad que el COVID-19 reveló de procesos remotos fiables que faciliten y aseguren las transacciones digitales.
Sin embargo, no todas las firmas son iguales, ni generan el mismo efecto jurídico probatorio. La realidad es que la mayor parte de las firmas que se utilizan carecen de representatividad legal para el carácter formal del documento que se quiere firmar.
Todos los factores que están impulsando el crecimiento del mercado de la firma digital, comparten un denominador común, la necesidad de garantizar la identidad digital durante transacciones electrónicas para erradicar el fraude, como la suplantación de la identidad o Phishing.
El marco normativo
La creciente demanda por las soluciones de firma digital ha obligado a gobiernos de distintos territorios a crear un nuevo entorno normativo. En Europa encontramos el reglamento eIDAS, en vigor desde 2014, que establece los estándares regularizadores de la identificación electrónica y los servicios de confianza entre los países miembros de la UE.
eIDAS reconoce 3 tipos de firma electrónica, simple, avanzada y cualificada, pero solo la firma cualificada ofrece el más alto nivel de seguridad, equiparándose a la firma manuscrita en cuanto a su validez jurídica. La firma cualificada garantiza la identidad del firmante y la integridad del documento electrónico firmado.
El reglamento eIDAS, en su artículo 3.16, define los servicios electrónicos de confianza para la creación, verificación y validación de firmas electrónicas, sellos de tiempo y certificados electrónicos, y constata que solo prestadores homologados por los organismos de supervisión correspondientes pueden ofrecer servicios de confianza.
Dentro de los prestadores de servicios de confianza (PSC) o Trust service Provider (TSP), existen cualificados o no cualificados, pero solo los Prestadores de Servicios de confianza cualificados o Qualified Trust services Provider (QTSP), como Víntegris, pueden ofrecer firma cualificada.
Tanto la UE, como el Gobierno de España, hacen pública una lista con el conjunto de empresas certificadas (TSL), lo que permite a cualquier persona comprobar directamente la validez y estado de homologación de cada servicio y prestador.
La firma cualificada y sus beneficios
El uso de la firma cualificada ha aumentado en los últimos años gracias a sus numerosos beneficios en términos de seguridad, autenticidad, fiabilidad, facilidad de uso y al bajo coste de las tecnologías de firma electrónica.
- Efectos jurídicos
El efecto jurídico de la firma cualificada es significativo, ya que se considera una prueba legalmente válida de la autenticidad e integridad del documento firmado.
Uno de los principales efectos jurídicos que se producen al utilizar la firma cualificada es la inversión de la carga de la prueba. En lugar de tener que demostrar que un documento electrónico es auténtico y que ha sido firmado por la persona que afirma haberlo firmado, la carga de la prueba se traslada a la parte que cuestiona la autenticidad del documento. Esto puede ser muy útil en casos en los que se producen disputas legales relacionadas con la autenticidad de documentos electrónicos.
Además, el marco jurídico para el uso de la firma electrónica proporciona una mayor seguridad para las partes que utilizan esta herramienta.
Todo esto ha llevado a un aumento en el número de casos de uso de la firma cualificada en diferentes ámbitos, como por ejemplo en la firma de contratos, en la presentación de documentos legales o en la realización de trámites administrativos.
- Usabilidad y accesibilidad de las soluciones de firma cualificada
Otro de los motivos del rápido crecimiento de los casos de uso de la firma cualificada se debe en gran medida a la mejora en la usabilidad de las tecnologías de firma electrónica, así como a la disminución de los costes asociados a su implementación.
En el pasado, el uso de la firma electrónica era percibido como complicado y costoso, lo que limitaba su adopción en muchos casos. Sin embargo, gracias al desarrollo de tecnologías más accesibles y fáciles de usar, por ejemplo las soluciones de firma electrónica basadas en la nube (SaaS), como nebulaSIGN o las aplicaciones de firma para dispositivos móviles, la firma cualificada se ha convertido en una herramienta más accesible para empresas y particulares.