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El pasado mes de mayo, la universidad de Cambridge se convirtió en la primera en establecer medidas restrictivas en cuanto a asistencia para todo el año académico 2020-2021 anunciando que trasladaría todas las “conferencias presenciales” a un formato on-line durante el tiempo que fuera necesario, ya que era “probable” que el distanciamiento social continuara siendo necesario debido al COVID-19.

Muchas otras universidades, institutos y escuelas de prestigio adoptaron también esta medida en todo el mundo y gradualmente anunciaron que suspenderían las clases presenciales hasta nuevo aviso y cambiarían sus cursos a formato online. La digitalización del sector de la educación se ha vuelto indispensable. La realidad es que la pandemia está provocando que más de 1.600 millones de niños y jóvenes estén sin escolarizar en 161 países; y nos referimos al 80% de los estudiantes matriculados en todo mundo. Sin embargo, este rápido paso a la enseñanza y el aprendizaje online como medio para frenar la propagación del COVID-19, ha puesto de manifiesto las debilidades del modelo educativo frente a la pandemia.

Las prisas por pasar a las plataformas on-line, ha generado algunas “vulnerabilidades” en muchas universidades que utilizan sistemas de learning management. La realidad es que migrar a un sistema de aprendizaje online implica más recursos humanos, no siempre con la capacitación suficiente. Además, los datos más sensibles ahora están disponibles en línea con muchos más intentos de acceso desde varios dispositivos. Este escenario deja a los sistemas de learning management como susceptibles de recibir ataques de denegación de servicio. Además, si alguna de esas universidades está trabajando en la investigación contra el coronavirus, esto la convierte en un objetivo aún mayor.

La pandemia ha obligado a las instituciones educativas a adoptar tecnología desconocida y realinear los procesos “sobre la marcha” con un tiempo limitado para evaluar los riesgos. Es necesario un nuevo modelo educativo… en el que la digitalización transversal del sector de la educación será necesaria.

Digitalización del sector de la educación para garantizar a la industria de la actividad educativa a través de las siguientes tecnologías:

  • Identidad digital, rompiendo las barreras físicas

El conjunto de información que se encuentra en línea sobre una persona u organización es lo que conocemos como identidad digital. Estas identidades están reemplazando cada vez más nuestra identidad física, y el COVID19 solo ha acelerado la adopción de esta tecnología, con el fin de promover el distanciamiento social y los procesos remotos. Una solución de identidad digital debe ser capaz de crear ID digitales para estudiantes, docentes, personal administrativo y dispositivos. De conseguirlo con total confianza y asegurando un nivel óptimo de seguridad. Actualmente es un recurso muy valioso para cualquier institución educativa. ¿Por qué razón? Porque permite a toda persona física identificar y autentificar su identidad, para poder realizar cualquier acción qué, por seguridad o simplemente para generar eficiencia, no requiere desplazarse físicamente a un lugar determinado. Imaginemos las posibilidades: los estudiantes podrían acceder a redes y plataformas educativas, realizar exámenes, tramitar procesos

académicos; todo esto brindando a la institución la seguridad de que realmente son ellos. Además, estos beneficios se pueden extrapolar a los trabajadores y su trabajo remoto.

  • Onboarding, acceso a plataformas educativas y empresariales a través de autenticación ágil y solida

En relación a la tecnología anterior, el nuevo modelo educativo debe ofrecer sus servicios basados ​web, como plataformas y cursos online, con acceso seguro para todas las partes de nuestra institución educativa: personal, docentes, estudiantes… Para ello, es necesario identificar a la persona y asegurar la veracidad de la misma, a través de su identidad digital mediante el proceso onboarding. Las soluciones de onboarding más innovadoras facilitan la creación de identidad rápida y su verificación remotamente en tiempo real, esto facilita la matrícula a distancia de los estudiantes independientemente de su ubicación geográfica, genera una mayor satisfacción al estudiante, facilita el trabajo del personal administrativo, evita presencialidad…

Las aplicaciones prácticas pueden ser múltiples: verificando la asistencia a clases remotas, acceso previa identificación a plataformas restringidas, comprobar la identidad de los estudiantes en exámenes por video identificación, reconocimiento facial biométrico para verificación de identidad al iniciar cualquier trámite, etc. La versatilidad en la identificación y posterior autenticación es notable para usuarios y dispositivos móviles. Dispositivos con contraseña de un solo uso (OTP) y tarjeta de red, PIN o mensaje de texto, o tokens de software para dispositivos móviles, reconocimiento biométrico, documentos de identificación e incluso a través de videos (la identificación por video ya es una realidad).

  • Certificado digital, garantizando la seguridad en todos tus trámites y procesos

Un certificado digital proporciona a los estudiantes, por ejemplo, registros digitales permanentes de su carrera, cuya autenticidad puede ser fácilmente verificable con un 100% de precisión y seguridad, en cualquier parte del mundo. Además de los certificados ya conocidos por todos los departamentos de administración — que son necesarios para realizar cualquier trámite empresarial— ya sea con la administración pública, el banco u otras organizaciones. Actualmente los certificados son sinónimo de legalidad y si vivimos en un mundo digital estos también deberían serlo.

Una TOP, facilita a las instituciones educativas crear y administrar certificados digitales cualificados sin tener que instalarlos manualmente en cada dispositivo. Este hecho especialmente útil en sector de la educación, tanto los estudiantes como los profesores deben firmar varios documentos a lo largo del año, como inscripciones, certificaciones, documentos de subvención y diplomas. Originalmente, esto significaba hacer mucho papeleo y la obligación de estar físicamente presente para hacerlo. Ahora, sin embargo, pueden hacerlo de forma digital, desde cualquier lugar, con reconocimiento legal. Pero no todos los certificados son igual de válidos, tu institución educativa debe asegurarse de que sean gestionado y emitidos por una , que cumpla con todas las regulaciones como eIDAS (UE) y ESIGN ACT y UETA (EE. UU.).

  • Firma Digital, racionalizando los procesos administrativos.

Si seguimos hablando de certificados, debemos hablar de las firmas digitales que ayudan a incrementar la productividad y ahorrar tiempo ante los tediosos procesos administrativo. Sin embargo, sus beneficios no terminan ahí ya que garantizan la seguridad de la información que consta en los documentos, garantizando su confidencialidad. También permite evitar el fraude y la suplantación de identidades en relación a diplomas y certificados, con el consecuente menoscabo sobre la reputación de la institución, si se dan estas amenazas.

Contar con una buena solución de firma digital significa que los estudiantes pueden: completar su papeleo de una manera rápida, firmar documentos desde sus portátiles o dispositivos móviles; acelerar sus procesos de registro y matrícula o la solicitud de becas. Esto significa que una solución de Firma Digital puede facilitar el reclutamiento de futuros estudiantes independientemente de su dispersión geográfica, además de reducir los tiempos de espera e incrementar la satisfacción de estudiantes y profesores. Junto a ello, se reducen los costes en papel, se mejora la organización de documentos y se protege el medioambiente.

  •  Archivo Digital, protegiendo el conocimiento en el Cloud

La digitalización y el archivo como una disciplina de la seguridad de la información ayuda a las instituciones educativas a gestionar de una manera más eficiente y segura toda información y registros personales a través de repositorios digitales. Es una herramienta de gran ayuda para preservar el histórico de cualquier entidad educativa mediante archivos que permiten tener un registro en base al cual educar a las futuras promociones. Pero no es un tema de futuro, en el año académico 2020-2021 ya está teniendo especial importancia. Estudiantes y trabajadores del sector de la educación deben acceder a toda la información necesaria de una manera segura, sencilla y de manera remota para así poder continuar con su actividad. Si volvemos a confinarnos este será un requisito esencial para que el sector de la educación no se paralice.

El verdadero potencial de todas estas innovaciones digitales es su integración en un sencillo ecosistema de herramientas; creando soluciones end-to-end, capaces de generar una respuesta poderosa en todos los procesos, tanto de los estudiantes como de los profesionales de las instituciones educativas. Integración, escalabilidad y adaptabilidad son elementos cruciales en la digitalización del sector de la educación.

Si quiere saber más sobre las ventajas de la digitalización en el sector de la educación pida una demostración sobre cualquiera de las tecnologías que aparecen en este post y véalas Ud. mismo o contáctenos. Estaremos encantados de responder a todas sus preguntas.

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